domingo, 2 de noviembre de 2014

La señal

Domingo 2 de noviembre


Un año hace ya que empezó la aventura de los Hambrientos por los campos de Madrid. Un año desde aquellas zetas de la Pedriza donde pasamos un frío del carajo. Ataviados con chaquetas y ropa de invierno... Qué diferencia. En este tiempo hemos puesto nuestra banderita en todo tipo de lugares, ya fuera en bici, escalando o corriendo. La cosa es no parar. Para conmemorar este año de aventuras, no podíamos desaprovechar este domingo, probablemente el último de buen tiempo.


El trazado elegido discurre por la Casa de Campo, El Plantío y el Monte de Boadilla. Quedamos en la puerta del zoo los 4 mosqueteros: Milhouse, Podencus, Javich_GP y Maverick. Puestas a punto las monturas, nos adentramos en la Casa de Campo. Podencus nos dice que ha tenido un percance con unas cabras. Que casi le comen su mochila de Dora la Exploramonguer. Como si nada...Bordeamos la valla del zoo con más miedo que vergüenza, no se vaya a haber escapado algún tigre. Podencus y Javich_GP, hablando de su futura incursión en la Behobia, imponen su infernal ritmo tipo Verano Azul. Dejan de hablar con la primera tachuela del día. Una pena... Tenemos que andar con mil ojos. Hay más gente que en un centro comercial en navidades. Mucha gente corriendo, o como dicen los modernos, haciendo running... Si, es ironía. Mas que modernos, pertenecen al movimiento paletismo ilustrado. Hasta las narices de Union Jack y Tío Sam, de shoppings, de breaks y de running. Menos Shakespeare y más Cervantes.


Atravesamos Pozuelo, la parte más coñazo de la ruta, y llegamos a El Plantío. Ya en pista de tierra comenzamos a rodar seriamente. Aprovechamos para pasar uno de los momentos más divertidos del día. Una trialera llena de raíces que hace las delicias del personal. Pasadas las trialeras hacemos la parada de rigor. Aquí mandan los pistachos, almendras, plátanos y las barritas de alpiste de Milhouse. Hechas las fotos, nos liamos a dar pedales hacia el Monte de Boadilla.







Antes de llegar vivimos el momento de la jornada. En apenas 50 metros, Podencus está a punto de irse al suelo. Algunos dicen que fue penatly. A Milhouse se le mete un palo en la cadena y Javich_GP va pinchado. Pues a arreglarlo toca. Después de poner la nueva cámara, no quiere entrar aire. Pues nada, cambiamos de bomba. Sigue sin entrar aire. ¿La cámara es nueva? Javich_GP afirma con rotundidad. Convencería al juez más incrédulo. Bueno, por si acaso vamos a cambiarla por otra a ver qué pasa. Sacamos la cámara y al hincharla se oye: Pssssssssh. Coño, si está pinchada. ¿Habrá sido de un pellizco al meterla en la rueda? Seguimos el sonido para ver de donde sale y ... Bingo!!! El sitio estaba marcado con una señal hecha con boli. La cámara era más vieja que Matusalén. Javich_GP, qué tío más grande!!!


Después de las risas y comentarios toca ponerse en marcha. Llegamos al Monte de Boadilla, donde nos esperaba la rampeja más cabrona de la ruta. Los semblantes sonrientes todavía recordando el pinchazo, cambian a caras llenas de sufrimiento y sudores. Desde delante se oían gritos. Que voy! Que voy! He reventado! Pero no se vio a nadie. Debió ser una mosca.


Llegamos a buen ritmo a la Ciudad de la Imagen. Pero, no están las torres de Madrid. Esas maravillas arquitectónicas de las que todo buen madrileño debería presumir. Me habéis pillado. Es ironía ;) Joder qué raro, si esta mañana sí estaban. No se las ve. Quizá sea por la inmensa boina de mierda que hay sobre Madrid y que todos los días nos tragamos. Qué rico!!

Todo picando ya hacia abajo, llegamos al zoo en un abrir y cerrar de ojos. Al final se ha hecho corta la ruta y todo. 48 Km que han sabido muy bien. Un placer rodar con vosotros compañeros!!!

Espero que este sea el primero de muchos años por venir. Suerte a los de la Behobia.

HAMBRIENTOS AL PODER!!!!!


MAVERICK

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